Eneko Goia, junto con familiares de personas deportadas a campos de concentración nazis, realizaron un homenaje a las víctimas junto a la escultura “Urdina”, situada en los jardines de Aiete.

"Se trata de un acto más dentro de la recuperación de la memoria histórica de la ciudad, un reconocimiento a estas víctimas para no dejar su historia en el olvido y que el conjunto de la ciudadanía conozca lo que muchos y muchas donostiarras padecieron”, señaló la concejala de Derechos Civiles, Ane Oyarbide

En septiembre del pasado año se erigió la escultura Urdina en Aiete, como homenaje a las veintidós víctimas donostiarras deportadas a los campos de concentración nazis entre 1940 y 1945. La obra es fruto de la Declaración Institucional aprobada por unanimidad el 28 de enero de 2020 en recuerdo de quienes lucharon por las libertades y contra el nazismo.

El acto institucional se celebra con motivo de la conmemoración, el 27 de enero de 1945 de la liberación por las tropas soviéticas del campo de concentración y exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau. Con tal motivo, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó oficialmente esa fecha Día Internacional en Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto.

Ese día, la Casa de Cultura de Aiete fue escenario de una conferencia a cargo de Etxahun Galparsoro (historiador, investigador de deportados republicanos en Mauthausen y sobrino nieto de deportado), bajo el título “Campos de concentración y mujeres”.