Los huevos de pato de la plaza Ramón Labayen están cuidados y en buen estado

Los huevos están en un caserío, adonde se han llevado para su cría

El departamento municipal de Parques y Jardines tiene a buen recaudo los siete huevos de pato que fueron retirados ayer de la plaza Ramón Labayen.

Los huevos están en un caserío, adonde se han llevado para su cría y una vez que nazcan los patitos serán trasladados al parque de Cristina Enea, donde tendrán los cuidados del resto de patos del parque, con comederos, etc.

Responsables del departamento tenían ya prevista la actuación en la plaza, con una mejora de la vegetación y el cambio del árbol, un abedul que fue plantado durante el proceso de ampliación del parking de Okendo y mejora de entonces Plaza de Santa Catalina (2009) y que estaba desde hace tiempo completamente seco. De hecho, en los últimos tiempos se iban retirando algunas partes ya muertas del árbol, que se había convertido en una “escultura seca”. El árbol será sustituido esta misma semana por un cornejo, que dará una llamativa floración.

La actuación se llevó a cabo ayer tras constatar que en las últimas semanas no estaban por la zona los patos que iban y venían al lugar desde la pandemia. Al proceder a retirar la vegetación del centro del estanque observaron que había huevos, que depositaron en los jardines del entorno. Al rato, la pata reaccionó removiendo los huevos y rechazándolos, por lo que se optó por trasladarlos a un caserío, donde están siendo incubados por una gallina.

Los servicios municipales han señalado que la jardinera en la que estaba el abedul no presentaba las mejores condiciones para un crecimiento óptimo del árbol, situación similar a la que presenta el abedul que se plantó con motivo de la reforma de Reina Regente. Ahora, se va a mejorar la base, remover y airear el sustrato y a sustituir la vegetación que había (loniceras, un arbusto bajo fitotóxico que no beneficia precisamente el crecimiento del árbol) por un entorno de gramíneas y otras plantas vivaces que favorezcan el hábitat de los patos, asumiendo que ese estanque sea definitivo para su estancia.