PROCESO PARTICIPATIVO PARA LA RENOVACIÓN DEL POLIDEPORTIVO DE ALTZA



El Polideportivo Municipal de Altza se construyó en 1992, y dos décadas después se constató, en base a las valoraciones tanto técnicas como de la ciudadanía, que se trataba de un edificio de baja eficiencia energética, con grandes superficies de fachada y cubierta, con problemas de humedad, con límites en su oferta (en el proyecto original no se recogían los gimnasios y hubo que acondicionar otros espacios para ello)...



Fruto de la colaboración entre Donostia Kirolak y la Dirección de Proyectos y Obras del Ayuntamiento, se vio la posibilidad renovar el Polideportivo y aprovechar la oportunidad para crear una nueva zona urbana para el barrio, así como nuevas piscinas exteriores y solarium.

En 2013 se puso en marcha un proceso participativo con las y los vecinos para que pudieran formar parte del proceso de renovación de esta instalación deportiva.

El proceso se organizó en las siguientes fases:

1º) Se celebrarían dos reuniones para recoger las aportaciones de las y los ciudadanos a los pliegos de licitación

2º) El Ayuntamiento organizaría un concurso de ideas

3º) Se elegirían 5 propuestas de entre las presentadas al concurso, se expondrían en Altza y se volverían a recoger las opiniones de las y los vecinos.

4º) El Ayuntamiento elegiría el proyecto ganador, se abriría una última fase para que la ciudadanía pudiera hacer sus aportaciones y se concretarían los plazos y afecciones de las obras.

En junio/julio de 2013 se celebraron las dos primeras reuniones abiertas con asociaciones y ciudadanía para realizar aportaciones. Entre otras propuestas, se planteó el mantenimiento de los usos existentes hasta la fecha, la conexión con el entorno (Auditz Akular, sur...), analizar el impacto en los aparcamientos... En las primeras reuniones participaron más de 100 personas, así como asociaciones de vecinos, deportivas...



Duranté 2014 el Ayuntamiento organizó el concurso de ideas, incluyendo en los pliegos aportaciones vecinales y de las asociaciones: se presentaron 26 proyectos de los cuales se seleccionaron 5.

La información sobre los proyectos finalistas se recogió en una exposición y cada grupo de trabajo presentó públicamente su proyecto.



En todas estas reuniones participaron representantes políticos y técnicos de Donostia Kirolak, Proyectos y Obras y Participación Ciudadana, que analizaron posteriormente las aportaciones ciudadanas.

En enero de 2015 se dio a conocer el estudio ganador del concurso y en febrero los ganadores del concurso presentaron públicamente el proyecto, recibiendo aportaciones ciudadanas para incorporarlo al proyecto definitivo. En la reunión también se habló de la planificación, de las afecciones de las obras y de cómo seguir manteniendo los servicios deportivos durante su desarrollo.



Se organizó un proceso de participación específico para recoger aportaciones para el diseño del exterior del equipamiento.



En el año 2016, a punto de comenzar las obras, la aparición de suelos contaminados con amianto como consecuencia de la actividad industrial registrada en el pasado retrasó la ejecución de las obras del Polideportivo: se organizó una comisión formada por diferentes departamentos municipales, junto con el Gobierno Vasco, para dar una solución adecuada a estos suelos contaminados.

Se creó una página web y se organizaron varias reuniones para informar sobre las actividades que se llevarían a cabo en torno al amianto, entre otras análisis de terrenos y calidad del aire, obras de regeneración de la parcela entre el polideportivo y Harri Berri Eskola y en la vaguada de Larres, recuperación de zonas ajardinadas del colegio Oleta, cierre preventivo de la zona contaminada de Sasauategi...



En 2017 se presentó un estudio que descartó la presencia de amianto en la parcela destinada a la construcción del Polideportivo de Altza y se celebró una reunión con las asociaciones vecinales.

Tras finalizar las obras, la instalación deportiva se inauguró en 2022.