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Pancarta con el texto  'Gora aniztasuna! - Bai aniztasunari'

Visión, valores y objetivos


San Sebastián es una ciudad de gente muy plural. Está compuesta por ciudadanos y ciudadanas procedentes de 130 países diferentes (censo 2017), cada cual con su cultura y sus costumbres, y se hablan también diversas lenguas.

En ese contexto, fomentar el conocimiento mutuo y la convivencia resulta fundamental para construir una ciudad abierta y fuerte.

En vista de esta realidad, en junio de 2013 el Ayuntamiento creó el Negociado de Diversidad Cultural, para poder garantizar la lengua, la cultura, la igualdad de oportunidades y los derechos sociales y políticos de toda la ciudadanía, tomando como punto de partida la diversidad cultural.

El objetivo consiste en construir relaciones basadas en el respeto y el reconocimiento mutuos, teniendo en cuenta todas las culturas y todas las lenguas, impulsando el conocimiento mutuo y la interacción y subrayando el valor positivo de la diversidad. Por eso, a la hora de gestionar las diversas culturas y procedencias, el Ayuntamiento de San Sebastián se basa en el modelo de interculturalidad; es decir, partiendo del respeto hacia todas las culturas, tratándolas a todas por igual y sin que ninguna tenga más poder que las demás, establece la base en las relaciones interculturales, utilizando como medios el conocimiento y el respeto mutuo.

Desde esa perspectiva, las personas migrantes tienen todo el derecho de mantener su cultura y su lengua, así como de conocer y de respetar la cultura y la lengua locales. Se debe ofrecer la posibilidad de vivir las diferencias en igualdad.

Para ello, a nivel de gestión municipal la transversalidad será un elemento importante. Debemos conseguir que todas las secciones municipales tengan en cuenta la diversidad de culturas y procedencias que hay en la ciudad y que la interioricen en su labor diaria, para poder atender a las necesidades de toda la ciudadanía y adaptar los servicios a dichas necesidades.

Queremos impulsar por tanto, una visión constructiva y participativa. Acoger a las personas recién llegadas, conocerlas, reconocerlas, respetarlas, valorarlas e integrarlas. El planteamiento consiste en construir nuevas formas de hacer conjuntamente partiendo del conocimiento mutuo.