Álvaro de Laiglesia González *1922, San Sebastián +1981, Manchester. Nace en el seno de una familia acomodada. Se trasladaron a vivir a Madrid, conservando el domicilio familiar, ‘Villa Sorolla' situada en la falda de Igueldo, donde pasaban las vacaciones estivales. Los negocios familiares entraron en crisis y en el verano de 1936 la familia decide regresar a San Sebastián. Primero se trasladó la madre con las dos hijas y el joven Álvaro, y una semana después, saldría el padre con los dos hijos mayores, los planes se truncaron por el inicio de la guerra, separando a la familia.

Asentados ya en San Sebastián, Álvaro comenzó a colaborar con la revista falangista ‘Flecha' editada para un público infantil. Poco después trabajó en la revista ‘La ametralladora', también perteneciente a la falange y dirigida a los combatientes. A través de esta redacción conoció a Miguel Mihura, fundador y director de la misma.

Una vez finalizada la contienda y cerrada la revista, partió hacia la La Habana, donde trabajó en el ‘Diario de la Marina'. Pronto regresaría a Madrid, siendo contratado por Miguel Mihura como redactor jefe de ‘La codorniz'. Abandonó temporalmente el trabajo para alistarse en la División Azul, combatiendo en la 2ª Guerra Mundial donde resultó herido. Una vez recuperado volvió de nuevo al frente, esta vez como corresponsal del periódico ‘Informaciones'. A su regreso a Madrid, reinició su trabajo de redactor jefe. En 1944, Mihura se desliga de la revista, y nombra director a Álvaro de Laiglesia, que ejercerá el cargo hasta el cierre de la misma, en 1977. Colaboraron con de Laiglesia, figuras de la talla de Gómez de la Serna, Jardiel Poncela, Mingote, Chumi Chumez, y un largo etc. En 1952 firmó una exclusiva con José Manuel Lara, convirtiéndose en el humorista más leído de España. Compaginó la dirección de ‘La codorniz', con otros trabajos como guionista en series y películas para el medio televisivo. Así también escribió obras de teatro y libros, llegando a publicar más de cuarenta, la mayoría novelas, estando siempre el humor presente en todos sus trabajos. Murió en Inglaterra, en casa de unos parientes de su mujer, Anne Heath.